Un reducto de la detención pre-reflexiva. Una invitación a poner micrófonos a las sombras y bajar el volumen de los deflectantes brillos de neón.

jueves, 28 de agosto de 2008

Von (esperanza)

Música: el estribillo me hace escuchar "You, silent rose". Luego en la superficie no es inglés, ni islandés. Es sencillamente la primera composición donde empezaron a utilizar un idioma fonético inventado con fines exclusivamente musicales llamado "Vonlenska" (lenguaje de esperanza).

No es nada fácil escuchar a Sigur Rós, muchas de sus canciones, son como nudos en el estómago que se deshacen más lentamente de lo que a uno le gustaría. Aunque a final de cuentas merece la pena dejarse empapelar con esas envolturas sonoras inmemoriales.

miércoles, 27 de agosto de 2008

Aristas sin tallar

-Estás muy callada, ¿qué te pasa?- preguntó Antoine como si quisiera destapar a Enseen al airear las sábanas de raso beige.
-He visto cómo te sonreía. No soy tonta Antoine.
-Ingrid siempre sonríe a mucha gente, mi niña. No seas boba.
-Pues conmigo no lo hace, parece como si tuviera lástima de mí. Alguna razón podrá tener, ¿no?
-Anda, ¡qué razón va a tener!, vamos a dormir y no le des más vueltas.

Enseen concilió el sueño con mucha dificultad. Antes tuvo que repasar, uno a uno, cada segundo de la cena con Ingrid y Sammy. Un puzzle repleto de lecturas entre líneas y miradas cómplices, pensó ella. Pasada media hora y ya plenamente dormida, Enseen cogió el teléfono y llamó a Ingrid para espetarle:

-Deja a mi marido en paz si no quieres que te persiga toda la vida en sueños, zorra inmoral.- Enseen vocalizó las dos últimas palabras como si las quisiera dejar grabadas en la almohada con los labios.

-Tu marido no te quiere cateta, a ver si te enteras de una vez. Mira, pregúntaselo que ahí lo tienes.-dijo Ingrid desafiante.

Antoine entró en el sueño, se levantó de la cama y puso su mano en el pecho diciendo con una madurez impropia de él: -No quiero a nadie. Pero Enseen es quien me enseña cada día a ser mejor persona. Mi mujer es mi guía y jamás me apartaré de ella. No molestes más Ingrid y sal de nuestras vidas.

Enseen despertó medio llorando con una respiración entrecortada y silbeante. No sabía a cuál de las dos aristas aferrarse; las dos conducían a una dura caída.

jueves, 21 de agosto de 2008

Trinando en el cielo

Quisieron volar
Llegar tan alto como las gruas de Abu Dabi
Libres, convertidos en ángeles,
se les abrió el cinturón de la ignominia mundana.

Campesinos de la cordura
No están pero viven.
Sonriendo en la calima, sin dedos con qué apuntar.
Semillas de decencia de un campo sin abonar.

D.E.P.